LA HUELGA DE TAXIS, DESDE UNA PERSPECTIVA LEGAL

Estos días nos hemos hecho eco de la huelga que se está produciendo principalmente en Barcelona, secundada en otras ciudades como Madrid, Valencia o Sevilla de taxistas contra las licencias que reciben los coches de alquiler con conductor de plataformas como Uber o Cabify.

La crisis y la tendencia alcista del precio de los taxis han desencadenado una proliferación de plataformas online que se encargan de poner en contacto a usuarios y conductores para realizar trayectos interurbanos, estableciendo una gran competitividad al sector de los taxis ya que ofrecen precios, según las mismas plataformas, un 30% más baratos.

¿Qué diferencias hay entre los taxis y el alquiler de vehículos con conductor? La principal diferencia es que a los primeros se les exige una licencia de taxi y a los segundos una licencia VTC:

–              Las licencias de taxis son autorizaciones que ofrecen los ayuntamientos de cada ciudad para que la persona que la solicite pueda ofrecer este servicio.

–              Las VTC, sin embargo, son autorizaciones para ejercer la actividad de arrendamiento de vehículos con conductor.

La diferencia entre ambas licencias principalmente es el precio de adquisición, teniendo las primeras un precio de mercado de más de 100.000 euros con unas tasas de 3.000 euros, aunque el precio varía en función del municipio en el que nos encontremos y como sea la transmisión de esa licencia; y las segundas un precio de mercado de unos 40.000 euros (en realidad la licencia VTC cuesta unos 5.000€ pero está tan colapsada la concesión de estas licencias que solo se hace factible adquirir una por transmisión de una licencia ya concedida, lo que le otorga un precio variable y más elevado dependiendo de la oferta y la demanda).

Otra de las diferencias es la exigencia de cumplimiento de requisitos durante la vida de la licencia, es decir, los taxis han de pasar la ITV semestralmente, debiendo además realizar una ITV del taxímetro anualmente, han de establecerse en la licencia un máximo de 16 horas marcando qué días establecen de descanso semanal, mientras que las licencias VTC exigen los requisitos que cualquier otro vehículo de uso particular, ITV anual, la posibilidad de trabajar los 7 días de la semana durante las 24 horas, sin restricción alguna.

¿Cuál es el conflicto que se ha creado y qué piden los taxistas?

La Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres (LOTT) en su artículo 48 establece que “de conformidad con las normas comunitarias y demás disposiciones que, en su caso, resulten de aplicación, cuando la oferta de transporte público de viajeros en vehículos de turismo se encuentre sujeta a limitaciones cuantitativas en el ámbito autonómico o local, podrán establecerse limitaciones reglamentarias al otorgamiento tanto de nuevas autorizaciones habilitantes para la realización de transporte interurbano en esa clase de vehículos como de las que habilitan para el arrendamiento de vehículos con conductor.” De esta manera, se limitaba la concesión de una licencia de VTC por cada 30 licencias de taxis.

Sin embargo, en 2009 se publicó lo que se denominaba la Ley Omnibus que liberalizaba el transporte y eliminaba la limitación del número de licencias para el arrendamiento de vehículos con conductor. Así, a partir de 2009 se solicitaron numerosas licencias VTC superándose la citada proporción hasta que, en 2015, se aprobó un Decreto por el que se volvía a establecer la proporción 1/30 retirándose la aplicación de la ley Omnibus.

El resultado de este vaivén legislativo ha desembocado en que esta proporción se haya sobrepasado, existiendo actualmente 1 licencia VTC cada 8 taxis, como en el caso de Barcelona o 1 VTC por cada 4 taxis en Madrid.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, intentó introducir un requisito adicional a los conductores que ya tenían concedida la licencia VTC con el fin de intentar limitar el número de VTCs operantes, sin embargo, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña suspendió esta medida por carecer de competencias puesto que una norma local no puede servir para sortear una estatal y además, según el recurso presentado por la CNMV, por intromisión en el mercado con perjuicios para la competencia.

Así pues, los taxistas haciendo uso efectivo de su derecho a la huelga, solicitan la aplicación real de la ratio 1/30, suspendiendo licencias ya concedidas y aunque el gobierno ha informado de la intención de transferir las competencias sobre las licencias a las CCAA, los taxis mantendrán la huelga al no salir plenamente satisfechos de las reuniones celebradas estos días.

 

Estela Baztán Amills

Navarro Llima Abogados, S.L

Sin comentarios

Deje un comentario

Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al continuar navegando aceptas su uso. Más información

ACEPTAR
Aviso de cookies